HISTORIA DE LA CERÁMICA ANDALUZA

Es la historia de la cerámica, pero muy resumida para que quien tenga curiosidad se quede con cuatro conceptos claros.

      Desde la antigüedad la cerámica nos ha acompañado y ha formado parte fundamental de nuestra vida, nuestros hogares y nuestras creencias. Lo que ha cambiado de una época a otra a sido la función y algunas técnicas.

      En la prehistoria se encuentran las raices de nuestra existencia y como no de la cerámica. Fabricaban dos tipos de cerámica una funcional para preparar y conservar los alimentos. Y otra religiosa, en la cual fabricaban figuritas de mujer, que se cree que eran diosas de la fertilidad. Eran cerámicas cocidas pero carecían de esmaltes, por lo que las decoraban con incisiones o con barro de colores (engobes ) .

      Los primeros vidriados los encontramos en Mesopotamia y Persia.

      En España el primer cambio fue con la llegada de los romanos. Ellos nos enseñaron a utilizar la cerámica como parte fundamental de los edificios: ladrillos, tejas conductos de canalización,..

      La primera cerámica esmaltada llega ha España por el sur, traída por los musulmanes, los alicatados decorando las paredes y jarrones delicadamente decorados. Supone un cambio radical la cerámica pasa de ser funcional a decorativa, con motivos simétricas, vegetales y epigráficas con referencias a Alá. Otro ejemplo de este cambio que introducen son los ladrillos como decoración de paredes, lo podemos ver claramente en la Giralda de Sevilla.

       Los azulejos de un formato mas o menos cuadrado similar a los actuales, lo empezamos a ver en el siglo XV, aunque los colores eran muy limitados verde (óxido de cobre), morado (manganeso) y azul (cobalto). Ya se empiezan a utilizar temas religiosos de tema cristiano y heráldicos.

        Alrededor de 1500 llega a Sevilla Niculoso Pisano, que nos trae de Italia el amarillos y nuevos motivos decorativos. Él es el que hace que la cerámica se transforme en la que conocomos en la actualidad, primero en Sevilla y posteriormente pasa a Talavera y se extiende por el resto de la península.

        Hoy muchos azulejos de Pisano en Sevilla, fundamentalmente de tema sacro: personas del clero, la virgen y el señor. Es precioso el retablo del Alcazar de Sevilla situado en la capilla de los reyes católicos.

        Tenemos que agradecerle como impulsó la cerámica policroma meramente decorativa y le dio valor como arte. Trabaja los azulejos como un cuadro, no todos los artesanos podíar pintar este tipo de obras, porque además de conocer la técnica es preciso saber pintar, como es el caso de Pisano que ya era pintor.